Fotos, fotos y más fotos!

Las fotografías llegan a nuestra retina tan rápido y en tanta cantidad que nos impiden valorarlas como es debido.

Imágenes de gran sensibilidad y alta calidad pasan desapercibidas y no perduran en el tiempo. Gracias a las redes sociales y por culpa de la inmediatez y el consumo rápido las fotos se usan, difunden y comparten a toda velocidad y sin medida, la mayoría de las veces sin citar su autor ni su procedencia y por supuesto sin aportar ninguna información acerca del lugar que en ellas aparece.

Para alguien que ama los espacios naturales y la fotografía es algo doloroso.

Llamadme romántico, pero recuerdo con nostalgia esa época en que se veneraban las obras y nombres de, por ejemplo, Ansel Adams; en que Galen Rowell era toda una referencia y escuchar Greg Epperson, Ace Kvale, Gérard Kosicki, Philippe Poulet, Peter Mathis, René Robert, Bill Hatcher, Olivier Grunewald, Robert Bösch, Uli Wiesmeier... hacía soñar!

Precisamente, y sin menospreciar el resto de padres y maestros, el último me parece una inagotable fuente de inspiración de la que se sirvieron muchos de sus contemporáneos y alimenta a algún que otro fotógrafo actual, con imágenes de escalada y vuelo libre tremendamente imitadas pero difícilmente superadas.

Cada vez que disparo y hay un parapente delante del objetivo recuerdo algunas de las composiciones de Uli, como cuando veo una cascada de hielo pienso en Kosicki, Mathis o Poulet. Me parece de justicia no olvidar que, gracias a su ojo, los míos se han reconfortado o motivado en múltiples ocasiones. No recordar sus nombres y no valorar el trabajo de los artistas me parece una grave falta de respeto que, por bien de la cultura, es mejor no cometer.

Ah, y si estáis con ganas no os perdáis las imágenes de (seguro que me dejo otros muchos) Klaus Fengler, Mario Colonel, Pascal Tournaire o Dan Patitucci (honrado me siento de que en la portada de mi libro vaya una foto del primero, y que el  último se inspirase en el punto de vista de un par de trabajos míos de hace muuucho tiempo tras verse publicados en una revista de montaña de renombre internacional). Son, sin duda, para no parar de soñar!

José I. Gordito


FOTOS: J.I.G.